Hoy es miércoles 25 de marzo de 2015. Son las 9:16 y faltarían 14 minutos para ir a desayunar, como todos los días de clase, al comedor de la escuela.
Pero no. Hoy, 25 de marzo de 2015, no vamos a ir a desayunar al comedor.
Ojo, tampoco vamos a desayunar en la biblioteca, ni en el aula. ¡Ah, quizás en el patio! ¿No? ¿En el patio tampoco?
No. No vamos a desayunar, no vamos a tener clase y no vamos a hacer ninguna de las cosas que hacemos siempre que venimos a la escuela como escribir con tiza en el pizarrón que hoy es miércoles 25 de marzo de 2015.
Pero entonces, ¿qué es lo que pasa en esta escuela? ¿Por qué no hay clases el día de hoy? ¿Hubo un paro sorpesivo de borradores? ¿El gremio argentino de tizas y afines llamó al cese de actividades por tiempo indeterminado? No, esto no se trata de ninguna medida fantasiosa. (Aunque no voy a negar que me encantaría saber el desenlace de semejante conflicto gremial).
Resulta que esta Escuela, como todas, está conformada por muchos "pedacitos". Un pedacito de la escuela somos los maestros y profesores, otro pedacito las cosas que hacemos (por ejemplo la Revista de Animales que hicimos el año pasado). Otro pedacito son los chicos y las chicas. Otro la Dire, la Vice y las Secretarías. Y así podemos seguir y seguir... Pero el pedacito de Escuela que hoy nos interesa más que otros es el edificio.
Hoy no hay clases porque falta inversión en infraestructura escolar, es decir que hace mucho que el Ministerio de Educación no invierte dinero en este edificio.
Para que lo entendamos fácilmente pensemos en cómo se forma una bola de nieve: cae un copito arriba de otro y se le pegan algunos más. A medida que cae y rueda se va haciendo grande, tan grande que por cada vuelta que da se le pegan miles de millones de copitos. Al final tenemos una gran bola.
Bueno, algo así pasa con el edificio de nuestra escuela, sólo que tenemos que cambiar los copitos de nieve por problemas en el edificio. Hoy vemos la bola de problemas: no hay agua, no hay luz, no hay gas. No hay clases.
Mucha gente estuvo y está trabajando para que mañana sí tengamos clases. Nosotros tendremos que trabajar todos los días para que los pedacitos de Escuela que dependen de cada uno, sean los mejores. A ver si de esa manera los encargados del "pedacito Edificio" de la escuela (Infraestructura Escolar del Ministerio de Educación) se inspiran en nuestro trabajo y se animan a hacer el suyo.
Pero no. Hoy, 25 de marzo de 2015, no vamos a ir a desayunar al comedor.
Ojo, tampoco vamos a desayunar en la biblioteca, ni en el aula. ¡Ah, quizás en el patio! ¿No? ¿En el patio tampoco?
No. No vamos a desayunar, no vamos a tener clase y no vamos a hacer ninguna de las cosas que hacemos siempre que venimos a la escuela como escribir con tiza en el pizarrón que hoy es miércoles 25 de marzo de 2015.
Pero entonces, ¿qué es lo que pasa en esta escuela? ¿Por qué no hay clases el día de hoy? ¿Hubo un paro sorpesivo de borradores? ¿El gremio argentino de tizas y afines llamó al cese de actividades por tiempo indeterminado? No, esto no se trata de ninguna medida fantasiosa. (Aunque no voy a negar que me encantaría saber el desenlace de semejante conflicto gremial).
Resulta que esta Escuela, como todas, está conformada por muchos "pedacitos". Un pedacito de la escuela somos los maestros y profesores, otro pedacito las cosas que hacemos (por ejemplo la Revista de Animales que hicimos el año pasado). Otro pedacito son los chicos y las chicas. Otro la Dire, la Vice y las Secretarías. Y así podemos seguir y seguir... Pero el pedacito de Escuela que hoy nos interesa más que otros es el edificio.
Hoy no hay clases porque falta inversión en infraestructura escolar, es decir que hace mucho que el Ministerio de Educación no invierte dinero en este edificio.
Para que lo entendamos fácilmente pensemos en cómo se forma una bola de nieve: cae un copito arriba de otro y se le pegan algunos más. A medida que cae y rueda se va haciendo grande, tan grande que por cada vuelta que da se le pegan miles de millones de copitos. Al final tenemos una gran bola.
Bueno, algo así pasa con el edificio de nuestra escuela, sólo que tenemos que cambiar los copitos de nieve por problemas en el edificio. Hoy vemos la bola de problemas: no hay agua, no hay luz, no hay gas. No hay clases.
Mucha gente estuvo y está trabajando para que mañana sí tengamos clases. Nosotros tendremos que trabajar todos los días para que los pedacitos de Escuela que dependen de cada uno, sean los mejores. A ver si de esa manera los encargados del "pedacito Edificio" de la escuela (Infraestructura Escolar del Ministerio de Educación) se inspiran en nuestro trabajo y se animan a hacer el suyo.
Seño Rosario.